De los Documentos: Un colegio para la enseñanza de la Ciencia Cristiana

Retrato profesional de Mary Baker Eddy, alrededor de 1884, P00250, W. Shaw Warren. Foto del Colegio de Metafísica de Massachusetts, P05362. Programa de estudios del Colegio de Metafísica de Massachusetts. Retrato de M. Bettie Bell, alrededor de 1870-1885, P00363. Retrato de Roger Sherman, P01614.
En enero de 1881, Mary Baker Eddy obtuvo una carta fundacional para el Colegio de Metafísica de Massachusetts, institución cuyo fin era instruir a estudiantes de la Ciencia Cristiana. El año anterior, se había trabajado en la preparación de esta institución para “enseñar Patología, Terapéutica y Obstetricia. Ontología. La Ciencia Moral y la adaptación de la Metafísica al tratamiento de la enfermedad”.1
Mary Baker Eddy quería reclutar un cuerpo diverso de estudiantes de distintas regiones y profesiones, para que luego regresaran a sus hogares y practicaran la Ciencia Cristiana en sus comunidades. En 1884, ella publicó un programa que sirvió como una especie de manual del estudiante. Incluía información general sobre el colegio, una Constitución y Estatutos para la Asociación de Científicos Cristianos (la asociación de los alumnos de Mary Baker Eddy) y alguna otra información sobre sus escritos y publicaciones. En 1886, se publicó una versión revisada, que incluía también una lista de estudiantes.
Una vez que el programa estuvo disponible, se envió en respuesta a muchas de las preguntas que la gente estaba haciendo acerca de las clases de Mary Baker Eddy. Varias de las cartas que ella recibió llevaban la anotación “Prog. enviado”, lo que quería decir que se había enviado una copia del programa. Recientemente, el equipo de los Documentos de Mary Baker Eddy estuvo estudiando el programa, en vista de las muchas cartas que hacían referencia a él. Nos llamaron la atención algunas de las declaraciones de Mary Baker Eddy respecto a quiénes podían estudiar en el colegio, entre ellas, la siguiente:
[El Colegio de Metafísica de Massachusetts] acepta estudiantes de ambos sexos. Satisface la exigencia de la época de algo superior a la física, la higiene material y los medicamentos para restaurar la raza, la esperanza, la salud y la perdida Ciencia de la Curación Divina.
El programa se refería también a cuatro características esenciales del colegio, incluyendo “La absoluta exclusión de distinciones de sexo en estudiantes, maestros o predicadores”.2
Estas declaraciones nos hicieron reflexionar sobre lo que significaba para Mary Baker Eddy recibir a hombres y mujeres como alumnos del Colegio en condiciones de igualdad. Aunque en aquella época en Nueva Inglaterra las instituciones educativas aceptaban tanto hombres como mujeres, habitualmente asistían a instituciones separadas. Según Mary Baker Eddy, “las distinciones de sexo” no afectaban la capacidad de las personas para aprender las enseñanzas de la Ciencia Cristiana y transformarse en sanadores eficaces. Nos preguntamos si sus alumnos pensaban lo mismo. Para ello, exploramos parte de su correspondencia, anotando las preguntas que ella recibía respecto a quiénes podían ser estudiantes exitosos del Colegio de Metafísica.
Pearl D. Hoyt le escribió a Eddy y le preguntó si podía ir a estudiar con ella en Boston, o con los Shermann, una de las primeras familias relacionadas con la Ciencia Cristiana en Chicago, la ciudad natal de Hoyt.3 Mary Baker Eddy le respondió lo siguiente:
Para adquirir la Ciencia Metafísica aplicada al tratamiento de la enfermedad, se requiere lo mejor de los maestros, y un conocimiento cabal de ella, de modo que ninguna pregunta en la mente del estudiante quede sin respuesta. Si usted tiene mi obra, Ciencia y Salud, puede ver que hay muchos requisitos para ser un maestro o sanador adecuado, y nada en la práctica es más pernicioso para la salud y la moral que un maestro o practicista de Metafísica no calificado.4
Para Mary Baker Eddy, la calidad de la enseñanza era un aspecto fundamental para el éxito del estudiante.
En esa época, el programa de estudio aún no estaba disponible, y Hoyt le hizo otras preguntas. En particular, le preguntó directamente: “¿Es cierto que las Mujeres tienen más éxito como sanadoras? Y si es así, ¿a qué se debe?”.5 Aunque Mary Baker Eddy no abordó esta pregunta en su respuesta a Hoyt, quizá el lenguaje específico del programa de estudio del colegio tenía la intención de responder precisamente esa clase de pregunta.6
Hoyt también mencionó que su tía de 65 años tenía mucho interés en aprender Ciencia Cristiana. Otras cartas revelan preguntas de potenciales alumnos que consultaban si su edad podía ser un impedimento para estudiar con Mary Baker Eddy. Sarah Heywood le escribió desde Wisconsin: “Tengo cincuenta y tres años y quisiera saber si mi edad me impedirá aprender las verdades de Cristo”.7 Mary Baker Eddy le respondió: “Su edad no la inhabilita en lo más mínimo para aprender Ciencia Cristiana; he tenido alumnos de ochenta años y otros de diez que han hecho maravillosas curaciones… El mejor momento para hacer el bien es ahora”.8
Otras personas se preguntaban si era necesario poseer un don especial para estudiar. En 1884, la Sra. C. Bond le escribió a Mary Baker Eddy desde Illinois:
¿Qué es este poder sanador? ¿Se realiza mediante la imposición de las manos, o por la Fe la oración? ¿Es un don heredado o adquirido y cualquier persona lo posee o es cierto que pocos lo poseen o pueden poseerlo? Como verá, soy bastante ignorante respecto a este tema; espero y confío en que usted me ilustrará dándome la información deseada. ¿Cómo puede uno saber si posee este poder sanador?9
En respuesta, Bond recibió una copia del nuevo programa de estudio.
Descubrimos que después de asistir a la clase, hombres y mujeres escribieron cartas a Mary Baker Eddy, detallando lo que la experiencia había significado para ellos. El esposo de Mattie Williams se había opuesto firmemente a que su esposa asistiera a las clases del colegio. Tras regresar a su hogar, Mattie Williams le escribió a Mary Baker Eddy lo siguiente:
Tuvimos un agradable y provechoso viaje de regreso a casa
Encontramos varios corazones receptivos y hambrientos de la Verdad [,] la Semilla del Reino, y comenzamos a Sembrar en nuestro viaje a casa. El señor Williams y mis dos hijos, George y Charles, me recibieron en la estación con un gran Trineo de paseo. Mi esposo no tuvo vergüenza de irme a buscar[;] se notaba en él un gran cambio. ahora rara vez se aparta de mí. anoche no fue a trabajar[,] se quedó en casa conmigo.
Todo está y estará bien[;] el reino de la armonía ha comenzado en mi propio querido hogar. Dios está con nosotros.10
Al parecer, asistir a clase con Mary Baker Eddy ayudó a los Sherman a establecer su práctica sobre una base más sólida en Chicago. Bradford y Roger Sherman le escribieron a Mary Baker Eddy: “A menudo rememoramos las provechosas y valiosas lecciones que recibimos en el Colegio. y sus incansables sinceros esfuerzos por guiarnos por el camino correcto hacia la verdad mediante la ciencia”.11
Al reunirse con su familia después de asistir a una clase en 1885, M. Bettie Bell, quien estudió junto con su hermano, le escribió a Mary Baker Eddy lo siguiente:
No se imagina el gozo que tengo con las recientes enseñanzas que recibí[;] puedo manejar la cuestión del Magnatismo Animal con sorprendente éxito; no sé por qué estaba en creencia tan hosca y confundida. ciertamente “Jehová es mi pastor nada me faltará”. muchas gracias por su paciencia, amor y ternura[.] mi hermano exclamó ¡oh, Hermana! si pudiera verla todos los días, sería un hombre mejor. y nunca estuvo tan renuente a dejar un lugar extraño, tan hermosos eran los corazones y la influencia que nos rodeaban; ojalá siempre pudiéramos estar en tan leal compañía como la de nuestra Maestra y sus preciosos Alumnos12
Tengo su interesante carta a mano. Estoy encantada de saber que usted y su hermano están bien. Siento gratitud y gozo. Dios bendiga a estos amados alumnos, vino a mis labios al leer la carta.13
Ciertamente Mary Baker Eddy se dio cuenta del valor de que varios integrantes de una familia asistieran juntos al Colegio de Metafísica de Massachusetts, ya fueran cónyuges, padres e hijos, o hermanos, y en tales casos ofrecía un descuento en el precio. Por ejemplo, en junio de 1885 le escribió a Emily F. Seal: “A usted y a su hija les ofreceré el máximo descuento, no porque los considere indigentes, sino porque es un privilegio para mí enseñar a dos integrantes de la misma familia, serán de gran ayuda mutua en el futuro, como les mostraré a ambas”.14
Surge claro de esta correspondencia que el estudio y la práctica de la Ciencia Cristiana estaban disponibles para todos quienes estuvieran humildemente dispuestos a aprender.
Este artículo también se puede leer en este sitio web en alemán, francés, inglés y portugués.
- Mary Baker Eddy a James C. Howard, 1880, L08647, https://mbepapers.org/?load=L08647.
- Programa de estudio del Colegio de Metafísica de Massachusetts, 1884, 000000000012, https://mbepapers.org/?load=000000000012.
- Pearl D. Hoyt a Mary Baker Eddy, 28 de septiembre de 1883, IC679B.76.045, https://mbepapers.org/?load=679B.76.045.
- Mary Baker Eddy a Pearl D. Hoyt, 7 de octubre de 1883, L15520, https://mbepapers.org/?load=L15520.
- Pearl D. Hoyt a Mary Baker Eddy, 11 de octubre de 1883, IC679B.76.046, https://mbepapers.org/?load=679B.76.04.
- Mary Baker Eddy a Pearl D. Hoyt, 17 de octubre de 1883, L15521, https://mbepapers.org/?load=L15521.
- Sarah E. Heywood a Mary Baker Eddy, 6 de octubre de 1883, IC549.58.001, https://mbepapers.org/?load=549.58.001.
- Mary Baker Eddy a Sarah E. Heywood, 11 de octubre de 1883, L07822, https://mbepapers.org/?load=L07822.
- Sra. C. Bond a Mary Baker Eddy, 19 de octubre de 1884, IC649A.67.017, https://mbepapers.org/?load=649A.67.017.
- Mattie Williams a Mary Baker Eddy, 18 de marzo de 1884, IC589.60.008, https://mbepapers.org/?load=589.60.008.
- Bradford Sherman y Roger Sherman a Mary Baker Eddy, 16 de abril de 1884, IC321.44.020, https://mbepapers.org/?load=321.44.020.
- M. Bettie Bell a Mary Baker Eddy, 6 de diciembre de 1885, IC020A.09.005, https://mbepapers.org/?load=020A.09.005.
- Mary Baker Eddy a M. Bettie Bell, 14 de diciembre de 1885, L09898, https://mbepapers.org/?load=L09898.
- Mary Baker Eddy a Emily F. Seal, 16 de junio de 1885, L14305, https://mbepapers.org/?load=L14305.