El Monitor toma vuelo
Los archivos de nuestra Biblioteca Mary Baker Eddy contienen números de The Christian Science Monitor desde 1908, el año en que Mary Baker Eddy lo fundó como periódico internacional, a la fecha. Leer los titulares de los periódicos del pasado puede darnos una perspectiva de la vida por entonces. ¿Qué se consideraba importante, interesante, desafiante o esperanzador para poner en la portada?
Uno de los temas que cautivaba por igual a reporteros y lectores eran los vuelos propulsados por humanos. El Monitor cubrió ampliamente el crecimiento y desarrollo de la aviación en el siglo XX. Sus primeros informes nos dan una idea del comienzo de ese crecimiento durante la primera época del periódico.
El 19 de diciembre de 1908, el Monitor incluyó un artículo titulado “U.S. Aeroplanist Breaks Record” [Aviador estadounidense rompe récord]. El informe detallaba los continuos logros del pionero de la aviación Wilbur Wright (1867-1912):
LE MANS, Francia – El aviador estadounidense Wilbur Wright estableció un nuevo récord mundial para máquinas más pesadas que el aire al intentar ganar la copa Michelin, permaneciendo en el aire 1h 53m 59s. El récord anterior era de 1h 31m 51s, establecido por el propio Wright el 21 de septiembre…
Wright cerró un día triunfal al lograr otro récord, volando hasta una altura de casi 110 metros con viento fuerte y ganando el premio de altura del Sarthe Aero Club. Al principio se pensó que la violencia de la brisa lo obligaría a posponer su intento, pero Wright, sin inmutarse, lanzó su máquina y dio vueltas y vueltas por el campo. Cuando se elevaba a unos 27 metros del suelo, una repentina ráfaga de viento golpeó al aeroplano de lado, haciéndolo caer violentamente hacia atrás. Los espectadores se aterraron, pero Wright permaneció imperturbable y pronto enderezó su nave…
El Aero Club organizó una cena en honor de Wright para celebrar su doble victoria. El aviador que realice el vuelo más largo en aeroplano antes del 31 de diciembre de 1908 ganará la copa Michelin…1
Habían pasado cinco años desde diciembre de 1903, cuando Wilbur Wright y su hermano Orville intentaron con éxito hacer el primer vuelo, y menos de un mes desde el lanzamiento del Monitor, el 25 de noviembre de 1908. En los años siguientes, los titulares presentaban con frecuencia y de manera destacada historias apasionantes de esta naturaleza, detallando los avances y las competiciones que se desarrollaban rápidamente en el incipiente mundo de la aviación.
En una retrospectiva inédita sobre la historia de la cobertura de la aviación que realizó el Monitor, el escritor y periodista especializado en aviación Albert Hughes afirmó que “la aviación constituye un medio esencial de comunicación y, en el campo periodístico, donde la comunicación es importante para la gestión empresarial, The Christian Science Monitor siempre ha estado atento a todas las fases de la aviación”.2 Hughes afirmó que el auge del avión contribuyó a una cobertura periodística más eficiente “tanto mediante el rápido envío de despachos por correo aéreo como mediante el transporte aéreo de corresponsales a los rincones más lejanos de la tierra”. El efecto de estos acontecimientos sobre el periodismo en general (y sobre el Monitor en particular) es profundo. Y durante toda su existencia el Monitor ha informado sobre la actualidad aeronáutica. De ahí la necesidad de un redactor especializado en aviación como Hughes y, por un tiempo, de una página dedicada únicamente a noticias de aviación. Aunque la página en sí solo se publicó durante unos pocos años a finales de la década de 1920, Hughes podía presumir de una larga y fructífera carrera cubriendo noticias aeronáuticas.
Uno de los primeros y significativos acontecimientos que cubrió el Monitor fue el primer encuentro de aviación Harvard-Boston. Tuvo lugar a principios de septiembre de 1910 en Squantum, Massachusetts, al sur de Boston. Hughes calificó el evento como “el primer y más importante encuentro aeronáutico que se haya celebrado en la región noreste de los Estados Unidos”.3 El encuentro duró casi dos semanas y tuvo una amplia cobertura del Monitor, incluidos artículos diarios de portada, un mapa panorámico de dos páginas del área de Boston e informes sobre pilotos estadounidenses e internacionales destacados que participaron del encuentro. Durante este período, Francia e Inglaterra fueron fuertes contendientes en la carrera por conquistar los cielos. El piloto británico Claude Grahame-White, un conocido pionero de los vuelos en su tierra natal, hizo una gran demostración en el encuentro.
Mary Baker Eddy, destacada admiradora del propio Grahame-White, pudo haber estado entre los entusiastas participantes del encuentro de aviación de Harvard, aunque no asistió al evento. En su libro de 1958 Commitment to Freedom [Compromiso con la libertad], Erwin D. Canham escribió que ella “hizo que varias personas que trabajaban en su hogar fueran a la playa de Squantum, cerca de Boston, donde tuvo lugar el vuelo [de Grahame-White], para poder contarle en detalle lo que había ocurrido”. Calvin Frye, secretario personal de Mary Baker Eddy y gran admirador de las máquinas, fue uno de ellos. En sus reminiscencias de 1932, Irving C. Tomlinson escribió que un día durante el encuentro, Frye “entró apresuradamente a la casa, se cambió de abrigo, se subió al automóvil y a las dos en punto partió hacia Squantum… Regresó a casa a las cinco de la tarde. Estas fueron las vacaciones más largas que Frye se tomó en todos sus años de servicio; lo que indica claramente su dedicación”.4 Aunque las investigaciones realizadas indican que Frye tuvo, en efecto, otros breves períodos de tiempo libre, no hay duda de que su trabajo fue incansable y todo parece indicar que lo realizó con un espíritu de compromiso voluntario.
Mary Baker Eddy estaba tan entusiasmada con el evento que se dice que su personal se comunicó con Grahame-White y le preguntó si podía intentar volar sobre su casa en Chestnut Hill, Massachusetts. (Él se rehusó y mantuvo un vuelo relativamente seguro sobre el agua).5
Este gran interés por la aviación está en línea con lo que sabemos de las opiniones de Mary Baker Eddy respecto al inmenso progreso tecnológico que ocurrió durante su vida. Las nuevas invenciones, dijo ella, “[i]luminan el camino hacia la Iglesia de Cristo. Las usamos; las empleamos como metáforas. Ellas están preparando el camino para nosotros”.6 Desde su punto de vista, los avances tecnológicos podían hacer posibles cosas nuevas, ampliando así el alcance de su mensaje. Sin embargo, no extendió esta idea libremente a todas las nuevas comodidades. Por ejemplo, si bien parece que el mundo de los vuelos le llamó la atención, prefería sus caballos al automóvil.7
En medio de la emoción por el hecho de que la humanidad hiciera realidad el sueño de volar, y junto con todas las demás formas de progreso de la época, surgía amenazante la sombra de la Primera Guerra Mundial. Ese informe de 1908 del Monitor acerca del vuelo sin precedentes de Wright concluía mencionando la progresión del desarrollo de los dirigibles en Berlín: “El diseñador (de un modelo de globo que se decía rivalizaba con el líder del campo de los dirigibles, el Conde Zeppelin) espera poder transportar dos toneladas de explosivos en su nave, además de otros suministros; declaración [que] indica claramente el propósito militar de la invención”.8 El potencial militar de la aviación no era ningún secreto para los inventores y pilotos. El informe también analiza la presencia del ejército de los Estados Unidos en los encuentros aéreos de Boston. No obstante, Wright, Grahame-White y sus rivales llevaron sus máquinas a nuevas alturas con un sentido de deportividad y aventura. A pesar de todo el potencial destructivo que el “aeroplano” poseía, tal vez persistía la creencia de que su potencial para tener un efecto positivo en el mundo era mayor, incluso como elemento disuasorio de posibles conflictos. Un elemento de esta perspectiva puede verse en el titular del Monitor del 8 de septiembre de 1910, publicado en pleno encuentro aéreo de Boston:
Gran descubrimiento aéreo de Grahame-White podría poner fin a todas las guerras
El presidente del comité del concurso de aviación, Charles J. Glidden, anunció hoy al mediodía que el señor Grahame-White había hecho un notable descubrimiento en su vuelo de altitud de ayer por la tarde, que podría poner fin a las guerras para siempre. El Sr. Glidden no puede dar más información al respecto, pero dice que hacia el final del encuentro todos los profesionales ascenderán juntos para desarrollar este descubrimiento…9
En retrospectiva, sabemos que ese optimismo era infundado; en ese momento la humanidad se acercaba a dos guerras inimaginables en una generación. El avión no sirvió como elemento disuasorio para los conflictos, aunque sí dio esperanza a la gente y cumplió muchos propósitos útiles en las décadas posteriores. El Monitor, por su parte, hizo honor a su lema de “no hacer daño a nadie, sino bendecir a toda la humanidad”, dando a esta declaración misteriosa y optimista la categoría de portada. Cuando Mary Baker Eddy falleció tan solo unos meses después de aquel histórico encuentro aéreo en Squantum, el periódico que ella fundó ofrecía a sus seguidores la esperanza de que el ingenio de la humanidad podría hacer que el futuro fuera más auspicioso.
Este artículo también se puede leer en este sitio web en alemán, francés e inglés.
- “U.S. Aeroplanist Breaks Record” [Aviador estadounidense rompe récord], The Christian Science Monitor, 19 de diciembre de 1908, 5.
- Albert Hughes, “The Christian Science Monitor in Aviation” [The Christian Science Monitor y la aviación], alrededor de 1953, 1. Archivos de la Iglesia, caja 20221, carpeta 124564.
- Ibid., 4.
- Irving Tomlinson, “Mary Baker Eddy: The Woman and the Revelator” [Mary Baker Eddy: La mujer y la reveladora], 12 de mayo de 1932, Reminiscencia, 650.
- Erwin D. Canham, Commitment to Freedom [Compromiso con la libertad] (Boston: Houghton Mifflin, 1958), 12.
- Mary Baker Eddy, La Primera Iglesia de Cristo, Científico, y Miscelánea (Boston: The Christian Science Board of Directors), 345. Mary Baker Eddy hizo esta declaración en una entrevista que concedió en 1901 al New York Herald.
- Irving C. Tomlinson, Twelve Years with Mary Baker Eddy, Amplified Edition [Doce años con Mary Baker Eddy, edición ampliada] (Boston: The Christian Science Publishing Society, 1994), 221.
- “U.S. Aeroplanist Breaks Record”, Monitor, 5.
- “Great Air Discovery by Grahame-White May End All War” [Gran descubrimiento aéreo de Grahame-White podría poner fin a todas las guerras], Monitor, 8 de septiembre de 1910, 1.